Generar espacios comerciales más verdes, atractivos y confortables es una de las misiones de muchas marcas de retail. Los motivos que hay detrás no responden únicamente al auge de apostar por una imagen más ecológica y sostenible, o a las demandas de los consumidores por una mejor integración de la naturaleza en los espacios urbanos. La presencia de plantas, flores y árboles en las tiendas, aporta una serie de beneficios que influyen tanto en la experiencia de los clientes como en el día a día de los trabajadores.

Gracias a Verdissimo, miembro de Kool y proveedor de soluciones de plantas preservadas para tiendas, en nuestro hub conocemos de primera mano los beneficios que los elementos vegetales aportan a los locales comerciales. Descubre más sobre Verdissimo y las plantas preservadas en esta entrevista.

Beneficios humanos y psicológicos

Las plantas influyen en el estado anímico y psicológico de las personas. Su presencia en el lugar de trabajo, el hogar y las tiendas tienen consecuencias muy beneficiosas, ya se trate de flores naturales o preservadas.

La simple visión de flores y plantas contribuye a que nuestro organismo libere endorfinas, desarrolle energía positiva y aumente la sensación de bienestar. En otras palabras: nos ayudan a sentirnos más a gusto con nosotros mismos y con los demás al conectarnos de una forma directa con la naturaleza. Es la acción de la biofilia, ese sentido de conexión profundo con todo lo natural y con otras formas de vida que incide en nuestro bienestar.

Las plantas también reducen los niveles de estrés. Se ha comprobado que la presencia de plantas y flores en oficinas y tiendas promueve la concentración, la eficacia  y la productividad de los trabajadores, mejorando notablemente su estado de ánimo. En un local comercial esto se traduce, por ejemplo, en una mejor atención al cliente.  En cuanto a los clientes en sí mismos, también se sienten más relajados y optimistas, siendo menos propensos a caer en sentimientos negativos como el miedo, la frustración, la ira o el enfado.

Trasladándonos a un nivel más físico, y gracias a su efecto relajante, las plantas también ayudan a conseguir una tensión arterial más saludable. En el caso específico de las plantas naturales, además, benefician al aparato respiratorio. Los árboles, flores y otros elementos vegetales que decoran los espacios comerciales estabilizan los niveles de humedad en el ambiente y purifican el aire gracias a su gran capacidad para reducir los índices de CO2 que respiramos.

Beneficios para las marcas

El diseño de locales comerciales tiende cada vez más hacia la creación de espacios amplios y diáfanos donde la presencia de plantas genera una dinámica muy positiva al dotarlos de una identidad propia y muy adaptable. Las plantas preservadas permiten crear composiciones murales, centros florales, jardines de interior, decoraciones verticales… ¡las posibilidades son infinitas!

Otra de las razones poderosas para decorar los espacios comerciales con elementos vegetales reside en que con ello se consigue que los clientes permanezcan mucho más tiempo en su interior y tengan un recuerdo más positivo de su shopping experience.

Si, además, empleamos los principios de la psicología cromática en el diseño de las composiciones vegetales, podemos apoyarnos en los estímulos que provoca cada color para potenciar diferentes impresiones o reacciones en los consumidores. Por ejemplo, el amarillo puede ayudar a mantener su atención, el azul tiene un poder relajante, el verde aporta frescura y calma, o el rojo contribuye a incrementar la vitalidad.

A todos estos beneficios hay que sumarle uno mucho más directo y sencillo: su poder decorativo, que en el caso de las plantas preservadas es un verdadero win-win, ya que este tipo de elementos vegetales no necesitan luz ni riego, son de larga duración, totalmente naturales y no generan alergias. Las plantas, flores y árboles preservados en el retail, ayudan a construir tiendas con identidad y que pueden adaptarse fácilmente a cada estación, colección o campaña publicitaria.